Marcos Pérez coloca al 'Baixens Triathlon Team' en la meca de esta competición deportiva
El catarrojense Marcos Pérez se proclama segundo en su categoría y quinto en la general, y su hazaña le otorga plaza directa al Campeonato del Mundo en Hawái.
IRONMANTM es una prueba reconocida mundialmente por ser capaz de llevar a todo aquel que se lo proponga a donde nunca antes había pensado que podría hacerlo.
Desde que fijó su residencia en Taiwán, Marcos Pérez Vázquez siempre ha tenido claro que un día quería afrontar con todas las garantías el reto de la marca de los sueños imposibles en una de las carreras más calurosas y expuestas al viento del mundo.
La pandemia fue un obstáculo que parecía desvanecer ese sueño pero que, con perspectiva, se convirtió en el acelerador que transformó a un deportista amateur en una fiera competitiva que no iba a conformarse con llegar a meta dignamente.
Los días anteriores a la carrera, la prensa especializada local no incluía a Marcos Pérez -que se presentaba a la prueba con el “Baixens Triathlon Club”- en ninguna de las quinielas para el top ten, lo cual afianzaba la estrategia de carrera que llevaba meses trabajando.
Brazadas contenidas
Con los primeros rayos de sol, iniciaba los primeros 3,8 km en la maravillosa playa de Shili, marcando un ritmo de crucero de 1´30´´/100 m desde las primeras brazadas. Fiel a su estrategia, y sabedor de que era una de sus fortalezas, levantó el pie en los últimos metros terminando noveno de la general y segundo de su categoría en ese primer sector.
Pedaleo estratégico
El sol, y sobre todo la ausencia de nubes, hacían temer que no iba a ser una mañana primaveral como había anticipado la previsión, pero lejos de amedrentarlo, Marcos siguió el plan introduciendo un ritmo sobre la bicicleta que ninguno de sus rivales directos esperaba, lo que provocó que la carrera se endureciese. Pronto Boss Hsieh, uno de los favoritos, no pudo soportar el ritmo pese a que lideraba la prueba desde la primera brazada y empezó a descolgarse, ocupando el liderato de la carrera Chang Tai Li, triatleta profesional con experiencia en el circuito ITU. Marcos mantuvo un ritmo muy fuerte al que solo respondía Penghsin Ko, por lo que a partir del kilómetro 120 parecía claro que los triatletas no iban a llegar tan frescos a la carrera pie. Marcos finalizó los 180 km en apenas 5:15 horas a una media de 34,5 km/h.
El maratón y el pase directo al Ironman World Championship en Hawái
Desde los primeros kilómetros de la maratón todos los corredores de cabeza impusieron un ritmo infernal de 4´15´´/km, pero los 32 grados en un circuito abierto sin sombra pronto hicieron recular a Marcos, consciente de que un desfallecimiento podría arrojar por la borda dos años de trabajo y dedicación. Chang Tai Li volaba, manteniendo un ritmo de otro planeta y proclamándose ganador virtual de la carrera a partir del kilometro 21. Era obvio que el deseado pase al campeonato del mundo iba a decidirse entre el favorito Boss Hsieh y un sorprendente Penghsin Ko, que no se despegaba de Marcos ocupando la segunda posición.
La batalla entraba en la fase decisiva, el kilómetro 30 de la maratón, después de casi nueve horas de esfuerzo máximo y donde la organización tenía reservada los últimos kilómetros a cielo abierto en una autovía donde el calor iba a otorgar el pase al campeonato del mundo a aquellos que realmente lo merecían.
En una batalla que seguro Penghsin nunca olvidará, Marcos nunca cedió la diferencia por debajo de los dos minutos haciendo que el taiwanés hincara la rodilla en el 41.
Después de haber corrido el último año 1.400 kilómetros a pie, 7.600 kilómetros en bicicleta y 420 kilómetros nadando, Marcos recorría el ultimo kilómetro sabiendo bien que anything is possible.
Quinto clasificado de una carrera con atletas de más de treinta nacionalidades, segundo de su categoría, Marcos Pérez Vázquez hacía historia convirtiéndose en el primer catarrojí en disputar el Ironman World Championship el próximo 8 de octubre en la isla de Kona, en Hawái (EEUU).
El patrocinador, Establecimientos Baixens
Un día Establecimientos Baixens soñó con una quimera. Y con trabajo, con dedicación, con esfuerzo y con pasión, con la constante búsqueda de la excelencia, con resiliencia, con innovación, pero por encima de todo soñando despierto, un día esa ilusión se hizo realidad.
Marcos Pérez llevaba soñando despierto más de dos años con algo imposible, así que el logo en su pecho era la brújula que debía marcar el camino hacia el lugar donde los sueños se hacen realidad.
Hoy se ha convertido en un orgulloso embajador de Establecimientos Baixens en la meca del triatlón, donde seguirá persiguiendo sueños y haciéndolos realidad.