Cómo realizar correctamente la operación de enlucido
Masillas y enlucidosEn este post nos vamos a centrar en explicar cómo debe aplicarse un enlucido paso por paso y cuál debe ser la posición de las manos y las herramientas para obtener un resultado profesional. Ya se trate de un enlucido de renovación, de alisado o de relleno.
Para realizar un buen trabajo cuenta, y mucho, la habilidad del aplicador, pero también es indispensable tener entre manos un buen material que asegure un resultado óptimo y que se adapte al proyecto que vamos a llevar a cabo. No obstante, sea cual sea el trabajo que vamos a desarrollar, una buena masilla debe cumplir, como mínimo, las siguientes características:
Excelente trabajabilidad
La trabajabilidad es la facilidad de aplicación, nivelación, extensión y cubrición de defectos superficiales que presenta un producto a la hora de ser empleado sobre el soporte que se desea revestir.
El profesional debe trabajar con una masilla que pueda aplicar de una forma dinámica y sencilla.
Buena adherencia
La adherencia es la fuerza de unión entre el material y el soporte sobre el que es aplicado.
Un buen enlucido debe anclar perfectamente sobre el soporte, especialmente si aplicamos un enlucido cubregota, que deberá estar especialmente formulado con resinas y aditivos que proporcionen una perfecta adherencia sobre superficies absorbentes de pintura plastificada.
Fácil de lijar
Mediante el lijado se produce una ligera abrasión de la capa superficial del producto para que la superficie quede totalmente lisa y sin imperfecciones derivadas de la aplicación.
Pese a poseer extrema dureza, el lijado se debe llevar a cabo fácilmente.
_ Paso a paso_
1. Realizar la mezcla
Si se trata de un producto en polvo, debemos realizar la mezcla con la ayuda de una mezcladora eléctrica a bajas revoluciones. Primero, vertemos el agua y, después, el polvo necesario para conseguir una pasta espesa y homogénea. Una vez preparada la pasta, la dejaremos reposar unos minutos y podremos comenzar a enlucir.
2. Primera capa de enlucido
En caso de tratarse de un trabajo de cubregotelé, previamente tendremos que haber raspado toda la pared con una espátula o rasqueta para eliminar las crestas del gotelé y, por supuesto, haber realizado el test de la cuadrícula y el test del golpeo para saber en qué estado se encuentra ese gotelé y si es necesario o no rascarlo al completo y no solo las crestas. Pero vamos a lo que nos ocupa, que es la aplicación del propio enlucido.
¡Es hora de comenzar a enlucir! La aplicación del enlucido se realiza verticalmente, siempre de abajo hacia arriba, con paleta ancha, poniendo material y quitándolo a continuación, procurando alisar y retapar todos los defectos de las superficies. Cada banda aplicada tiene que montar ligeramente sobre la banda contigua. Es muy importante respetar un orden de alisado.
3. Empalmes
Los empalmes se atrapan al contrario, de arriba hacia abajo. Las paletadas deben ser exuberantes y firmes, poniendo material y retirándolo a continuación, asegurándose de que no queden rayas.
4. Ángulos
Los ángulos entre las paredes, así como entre paredes y techos, deben sacarse con cuidado. Es cuestión de práctica: crear bien un ángulo no requiere ninguna especialización.
5. Lijado
Cuando el material seca se procede al lijado de las superficies, ya que estas pueden presentar aristas, rugosidades o defectos que no se hayan advertido durante el enlucido.
El lijado se realizará de forma preferentemente mecánica. Además, se recomienda el uso de lijas con un grano mínimo de 220 para evitar rayar el soporte enlucido.
El polvo resultante que se haya quedado depositado en el soporte habrá que eliminarlo con la ayuda de una brocha o paletina.
6. Segunda capa de enlucido
Si las superficies no han sido maestreadas y no presentan buena planimetría de partida, es posible que en la primera mano no se haya conseguido dejar un alisado perfecto. Para lograrlo, tendremos que una segunda capa de enlucido, esta vez horizontalmente, y siempre de abajo hacia arriba.
7. Empalmes
Los empalmes se cogen en esta posición y a esta altura, de izquierda a derecha, apoyando la mano izquierda sobre la paleta para ejercer mayor presión.
8. Segundo lijado
Después del secado de la segunda capa hay que volver a lijar, si procede, con mucha suavidad. Si, aún así, se observan algunas imperfecciones que no han podido ser atrapadas durante el enlucido, deben retaparse y lijarse antes de pasar a la fase de pintado. Para detectar las imperfecciones utilizaremos una bombilla de luz potente.
9. Revestimiento
Una vez lijado el producto y para finalizar el trabajo, podemos elegir entre la aplicación directa del recubrimiento decorativo, o bien optar por obtener un acabado de alta calidad y acabado extrafino. En este segundo caso, debemos aplicar sobre el enlucido de renovación, un enlucido de acabado extrafino.
El soporte ya está preparado para recibir el revestimiento de pintura.
Herramientas utilizadas
- Espátula ancha
- Amasadora eléctrica
- Lijadora mecánica
- Rodillo para pintar